23.000 euros por 100 días de aislamiento: la ESA busca participantes para un estudio espacial de gran relevancia

De Julius Wacker

Colonia - Se buscan seis participantes para un estudio espacial que vivirán aislados durante 100 días en un laboratorio de Colonia .

Para un estudio espacial, seis sujetos deberán vivir durante 100 días totalmente aislados en un laboratorio de Colonia. (Imagen simbólica)
Para un estudio espacial, seis sujetos deberán vivir durante 100 días totalmente aislados en un laboratorio de Colonia. (Imagen simbólica)  © Sina Schuldt/dpa

El iniciador es la agencia espacial europea ESA, y el análisis será llevado a cabo en la primavera de 2026 por el Centro Alemán de Aeronáutica y del Espacio (DLR).

Paralelamente, el DLR también busca participantes para un estudio de reposo en cama de 60 días que simula la gravedad, según anunció un comunicado.

La participación en el estudio de aislamiento será remunerada con 23.000 euros. Podrán postularse personas de entre 25 y 55 años. Además de estar en buena forma física, se requiere un título universitario y un dominio excelente del inglés.

Las solicitudes pueden enviarse hasta el 12 de diciembre a través del sitio web dlr-probandensuche.de.

Durante los 100 días, los seis participantes vivirán en una estación espacial simulada con rutinas diarias fijas: trabajarán juntos en tareas, practicarán deporte y se encargarán del mantenimiento de la estación, según se informó.

Los resultados ayudarán a preparar a los astronautas para misiones de larga duración.

Simulación de gravedad mediante reposo en cama

¿Volverán a aterrizar humanos en la Luna por primera vez en 2026?
¿Volverán a aterrizar humanos en la Luna por primera vez en 2026?  © Georg Hochmuth/APA/dpa

«Las futuras misiones espaciales tendrán como objetivo destinos lejanos como la Luna o Marte», afirmó la directora del estudio, Amelie Therre.

Para ello, será necesario investigar los efectos de condiciones extremas sobre la salud, el comportamiento y el rendimiento.

El estudio de reposo en cama, por su parte, busca examinar cómo contrarrestar las alteraciones físicas provocadas por la ingravidez.

En este experimento, los investigadores utilizan camas inclinadas seis grados hacia abajo en la zona de la cabeza.

De este modo, los fluidos corporales se desplazan, como en el espacio, hacia la cabeza.