Madrid - Europol y la policía española llevan desde 2022 tras la pista de una red intercontinental de cocaína.

El polvo blanco estimulante se enviaba desde Colombia a Europa, donde se extraía de los contenedores con la ayuda de empleados portuarios corruptos.

A continuación, la sustancia se vendía bajo la supervisión de ciudadanos búlgaros, colombianos y españoles.

El contrabando de drogas a gran escala estaba financiado por financieros albaneses establecidos en Dubai.

Europol anunció el viernes que la red tenía capacidad para inundar el mercado con una tonelada de cocaína a la semana.

Desde el inicio de la investigación, las autoridades han podido incautarse de al menos una parte de esta cantidad, lo que supone un total de seis toneladas de cocaína. Un total de cuatro toneladas fueron interceptadas en un puerto de Panamá.

En el transcurso de la operación policial se detuvo a un total de 22 personas, se registraron 27 propiedades en España, se confiscaron decenas de armas, artículos de lujo y 6,5 millones de euros en efectivo y se congelaron 53 cuentas bancarias.