Tres niños son suficientes: Glory se somete a una "rejuvenecimiento postparto" bajo el bisturí.
New York City (EE. UU.) – Después de tres embarazos, la neoyorquina Glory Lu (36) ya no se reconocía a sí misma. Su cuerpo había sufrido y la mujer de 36 años estaba frustrada. ¡ Necesitaba un “mommy makeover”!
Bolsones bajo los ojos, grasa excesiva en el abdomen y las piernas, pechos sin forma: Glory ya no se reconocía al mirarse al espejo. La fundadora de la marca de maquillaje “Myalu Beauty” quería volver a su yo de antes.
Por eso, la mujer de 36 años decidió someterse a una cirugía. “Sentía que era lo correcto, porque así soy realmente como persona”, comenta en una entrevista con People.
Sin embargo, no quería cambiarse por completo. Solo dar un paso atrás en el tiempo, para volver a lucir como a finales de los veinte después de los procedimientos. Glory optó, por su origen, por operarse en una clínica especializada en Corea del Sur.
La mamá triple comenzó de arriba a abajo: primero se arregló la nariz por aproximadamente 3 400 euros, luego se eliminó el surco nasogeniano y los bolsillos bajo los ojos por alrededor de 2 300 euros.
Glory Lu se compró de vuelta su antiguo yo, y con ello una gran cantidad de críticas.
Después de las primeras cirugías, Glory sintió que había recuperado la confianza en sí misma. “Me relacioné de forma diferente con la gente. La gente se relacionó de forma diferente conmigo”, dijo la neoyorquina. Sin embargo, aún no estaba satisfecha consigo misma.
Por eso, la segunda parte de su transformación incluyó ¡seis procedimientos! Por alrededor de 10 000 euros, Glory se sometió a una abdominoplastia y a la liposucción de muslos y torso. Sus nuevos senos costaron 2 000 euros y, por unos 2 600 euros más, la mujer de 36 años se hizo una vaginoplastía.
En total, Glory ha invertido hasta ahora, incluyendo otros pequeños procedimientos, el equivalente a 24 000 euros. Con ese dinero, la neoyorquina no solo compró más seguridad en sí misma, sino también una considerable cantidad de resentimiento.
Desde que hizo públicas sus cirugías, ha recibido “mucho odio”, sobre todo en línea y de otras mujeres que la critican por no aceptar su propio cuerpo.