Lily quiere recuperar su vida: el destino de la estudiante toca el corazón
Cardiff (Gales) - A principios de este año la vida de la británica Lily McGarry (24) dio un giro inesperado. Con síntomas parecidos a los de una gripe, la joven de 24 años tuvo que ser ingresada en el hospital. Poco después, todo cambió.

En la clínica, el estado de la estudiante de medicina empeoró rápidamente. Su circulación falló y la presión arterial cayó. Pronto quedó claro que Lily estaba infectada por meningococos, una infección agresiva. Comenzó una lucha por la vida.
En poco tiempo, el corazón de la joven se detuvo dos veces y los médicos de la Universidad de Gales en Cardiff la pusieron en coma inducido. Tras dos semanas llenas de esperanza y ansiedad, familia y amigos pudieron respirar aliviados por primera vez: el estado de Lily mejoró.
Sin embargo, una resonancia magnética trajo otro shock. El cerebro, el bazo y el hígado de la de 24 años resultaron gravemente afectados. No se podían descartar secuelas a largo plazo.
Además, la grave infección provocó una insuficiente irrigación de los brazos y piernas de la estudiante. Como consecuencia, Lily tuvo que amputarse ambas piernas por encima de la rodilla y ambos brazos hasta los codos. Rendirse no era una opción. Su fuerza y determinación permanecen intactas, según informó la familia de la británica en la plataforma de donaciones GoFundMe.
Lily McGarry volverá a la vida con la ayuda de prótesis.



Los familiares de Lily hicieron público su destino y siguen recaudando donaciones para ayudar a la estudiante a retomar su vida.
Antes de su enfermedad, Lily era una nadadora, corredora y surfista entusiasta. En 2019, la británica incluso participó en un mini-triatlón en la categoría de 16 a 19 años en Lausana, Suiza.
La joven de 24 años no quiere renunciar a su estilo de vida activo en el futuro. Prótesis diseñadas a medida y las donaciones recaudadas, que superan la mitad de un millón de euros, deberían ayudarla a volver a ponerse en pie.
Ocho meses después de su doloroso diagnóstico, las perspectivas no son desfavorables. Actualmente, Lily se está recuperando en el Hospital Universitario de Llandough, en el sur de Gales. “Un hito importante”, informó su familia.