Por Jörn Petring

Pekín (China) - Presionada por las autoridades, una empresa china ha retirado una nueva norma según la cual los empleados debían casarse o abandonar la empresa.

Según informa el periódico de Hong Kong "South China Morning Post", la empresa química de la provincia oriental china de Shandong quería aumentar la tasa de matrimonios entre sus aproximadamente 1.200 empleados. Por ello, en enero introdujo una nueva directriz.

Quien no se hubiera casado a finales de marzo tendría que escribir una carta de autocrítica. Si el matrimonio seguía sin celebrarse a finales de junio, la empresa habría llevado a cabo una "evaluación". No queda claro qué se entiende exactamente por "evaluación". Quien a finales de septiembre siguiera soltero, sería despedido.

La empresa también planea aplicar normas que obliguen a los empleados a adherirse más estrechamente a los valores tradicionales chinos.

Todos los empleados solteros y divorciados de la empresa con edades comprendidas entre los 28 y los 58 años se habrían visto afectados.

Sin embargo, las autoridades intervinieron poco después de que entrara en vigor la normativa. El caso fue criticado en las redes sociales chinas. El propio gobierno chino está intentando animar a los jóvenes a casarse más a menudo y formar de nuevo una familia. Para ello, se centra en la reducción de la burocracia y los incentivos económicos.

Tanto la tasa de matrimonios como la de natalidad llevan años tendiendo a la baja en China.