Brdy - En la zona checa de conservación del paisaje de Brdy, no lejos de Praga, unos pequeños roedores han conseguido grandes logros y, de paso, han ahorrado un total de 1,2 millones de euros.

Hace seis años debía haberse puesto en marcha allí un proyecto de renaturalización, como informó el Tagesschau.

Como tantas otras cosas, siempre ha fracasado debido a diversos obstáculos burocráticos.

Pero entonces ocurrió algo que nadie habría esperado: un grupo de castores se presentó y tomó el proyecto en sus manos.

Mientras las autoridades seguían discutiendo planes y autorizaciones, los laboriosos castores se pusieron manos a la obra. El resultado es impresionante: una presa perfectamente construida, sin excavadoras ni costosos retrasos.

Es más, la estructura creada por los roedores supera incluso los planes de la administración. Los animales han conseguido ahorrar a la administración del parque 1,2 millones de euros, pero eso no es todo: el futuro mantenimiento de la nueva presa también será gratuito.

Según Bohumil Fišer, director de la reserva natural local, los humanos nunca lo habrían gestionado tan bien como los castores. "Los castores tienen una mejor percepción del paisaje que nosotros, los humanos, con nuestra visión técnica", admite.

El efecto positivo ya es evidente: la calidad del agua ha mejorado, lo que beneficia a los raros cangrejos de río, así como a todo tipo de ranas y sapos. Quizá los futuros proyectos de construcción deban dejarse más a menudo en manos de la naturaleza.