Trágica muerte en una guardería: Pero Henry (†1) salva la vida de otro niño
Cairns (Australia) - El jueves pasado, Aaron y Rachel Spletter dejaron a su hijo Henry en la guardería. Pero no sabían que sería la última vez que verían a su hijo con vida.

Un reportaje del Daily Mail cuenta la trágica historia de esta joven familia. El jueves pasado, los padres recibieron una llamada inesperada de la guardería de su hijo en Cairns (Australia ).
Henry, de sólo 22 meses, dejó de respirar de repente. Llamaron inmediatamente al número de emergencias y los paramédicos trasladaron al niño en avión al hospital más cercano.
Intentaron por todos los medios mantener con vida a Henry, pero dos días después el pequeño perdió la lucha por su vida. Sucumbió a las consecuencias de una "lesión cerebral insuperable".
A pesar de su profunda tristeza, Aaron y Rachel describieron a su ángel como "maravilloso en todos los sentidos" en un desgarrador homenaje.
"Era un niño muy activo, una vez que se levantaba no podías pararle", recordó Rachel, su madre.

El corazón de Henry sigue latiendo en otro cuerpo

"Por lo que sabemos, el personal prestó unos primeros auxilios excelentes y les estamos agradecidos, así como a los servicios de emergencia y al personal de las unidades de cuidados intensivos".
Aún no está claro qué causó la muerte por asfixia de Henry. La investigación policial sigue en curso, pero su muerte ya ha sido clasificada como "no sospechosa".
La pareja decidió ceder el corazón de Henry para la donación de órganos. De hecho, a las pocas horas, el corazón fue "transferido con éxito a otro niño o niña".
Mientras tanto, Stuart Brown, un amigo de la familia, lanzó un llamamiento de recaudación de fondos en el sitio de donaciones GoFundMe para apoyar a Aaron, Rachel y su hija recién nacida Aubrey.
En pocos días ya se habían recaudado más de 67.000 euros.