Queensland (Australia) - Ronronear, silbar y acicalarse. Son cosas que un gato hace todos los días y que son completamente normales para el animal . Pero en una escuela de Australia , un profesor mostró de repente este comportamiento animal.

Según un artículo del diario británico Daily Mail, las clases en el instituto estatal de Marsden, en Queensland (Australia), se hicieron cada vez más extrañas para los alumnos.

Empezó con una profesora que llevaba orejas de gato en todas las clases. Más tarde, la misma profesora ya no quería que los niños se dirigieran a ella con su verdadero apellido, sino sólo como "Miss Purr".

Además, siempre llevaba un cordón en el que podía leerse la palabra "Purr".

La profesora también empezó a comportarse cada vez más como un gato durante las clases. Siseaba a los alumnos cuando se portaban mal o ronroneaba cuando resolvían una tarea correctamente. Según varios alumnos, también se lamía las manos como un gato se lame las patas durante los periodos de trabajo tranquilo.

Incluso llegó a obligar a un alumno a ronronear durante las clases para conseguir una piruleta.

Los padres de los alumnos afectados estaban furiosos y presentaron una demanda colectiva al director del centro para quejarse del comportamiento del profesor delante de los alumnos.

Uno de los padres, por ejemplo, escribió: "Queremos que nuestro hijo tenga un profesor al que pueda admirar, y no es alguien que lleva orejas de gato".

En un comunicado, la escuela escribió: "La escuela es consciente de las preocupaciones de los padres y el director ya ha discutido el tema con la profesora en cuestión."

Desde esta conversación, no se ha visto a la "señora Schnurr" en la escuela.