Queensland (Australia) - No vio venir este encuentro: Hace unos días, Kat Finnerty conducía hacia su casa en el norte del estado australiano de Queensland cuando vio algo grande tirado en la carretera. Al principio, la conductora pensó que era el tronco de un árbol. Pero en un segundo vistazo, ¡se quedó impactada!

Para horror de Finnerty, una pitón de unos seis metros le bloqueó el paso. "Estaba muy oscuro y acababa de entrar en la selva", declaró la autora a Yahoo News Australia en una entrevista.

Finnerty es canadiense, así que, a diferencia de los australianos nativos, no está tan familiarizada con encuentros de este tipo. Pero además del miedo a la serpiente, sintió otro.

"Tenía miedo de que viniera otro coche y la atropellara (...) Era tan enorme que pensé que habría sido trágico", declaró la canadiense a la revista News.

Finalmente, llamó a una amiga australiana y le pidió que la ayudara. Sin embargo, las dos señoras siguieron teniendo un problema cuando se pusieron juntas delante de la pitón.

La gran serpiente no mostró ningún interés por alejarse del peligro. En lugar de eso, se acomodó en la cálida calle.

Entonces la amiga de Finnerty se animó. "Finalmente le dio una palmadita en la cola y entonces se volvió hacia nosotros. Se volvió hacia nosotros con bastante violencia y nos sobresaltamos y gritamos", relata la mujer de Canadá .

"Nos quedamos allí otros 15 minutos, en punto muerto. Ella nos miraba, nosotros la mirábamos e intentábamos decirle que se fuera, pero no se movía", añade.

Pero hasta la pitón se hartó. Se apiadó de ella y se marchó. Aliviadas, Finnerty y su amiga pudieron volver a casa.