Peterborough - ¿Quién no lo ha vivido? Al buscar en Google los (a menudo poco llamativos) síntomas de una enfermedad, de repente aparecen diagnósticos de terror; pero Robin Hernon (62) de Peterborough ( Inglaterra ) experimentó lo contrario: su problema, que era realmente grave, lo tomó a la ligera después de una búsqueda en la red, con consecuencias amargas para él y su vida sexual.

En agosto de 2023, Hernon notó por primera vez una mancha blanca en su pene, como informó el Daily Star británico.
En lugar de acudir al médico, el hombre de 62 años comenzó a investigar en internet.

Concluyó que se trataba simplemente de una verruga. El padre de dos hijos y bisabuelo de cuatro esperaba que desapareciera con el tiempo.

¡Pero no fue así! Catorce meses después, la zona se había convertido en una “creciente parecida a un coliflor”. “Eso fue lo que me impulsó y pensé: ‘Tengo que ver a alguien’”.

Incluso en una clínica de salud sexual, al principio se pensó que podría ser una verruga, pero una evaluación por parte de un especialista reveló finalmente que Hernon tenía un carcinoma de pene, es decir, cáncer de pene.

Se programó una cirugía de inmediato. “Cuando el especialista dijo que era cáncer de pene, solo le respondí: ‘Haga lo que sea necesario para eliminar el cáncer’”.

Quería pasar mucho tiempo con sus nietos, “así que eliminen lo que tengan que eliminar”. En junio de este año se realizó la operación en el Norfolk and Norwich University Hospital.

Hoy puede mirar el resultado con una buena dosis de humor, también porque lleva varias semanas con la certeza de que el cáncer ha desaparecido.

“Fue una resección parcial, así que ahora tengo un ‘mini‑yo’. El órgano interno sigue funcionando, por lo que todavía puedo orinar en una zona similar.”

Para los demás, ya tiene un mensaje de advertencia: “No puedo enfatizarlo lo suficiente: si algo no está bien, deben investigarlo”.