Los Ángeles (California/EE. UU.) - El Golden Retriever Zebby no puede imaginar nada más hermoso que ser acariciado por sus personas favoritas, y preferiblemente durante todo el día.

En un video que sus dueños han compartido en TikTok , se sienta en una manta y observa con satisfacción cómo su dueña le acaricia la pata.

Lo que sucede a continuación es claramente devastador para el perro: la joven mujer simplemente deja de hacerlo.

Atónito, el perro la mira fijamente durante varios segundos antes de dejar caer la cabeza en la manta con frustración y tristeza.

Su mirada se vuelve vacía, parece sumergirse en la autocompasión durante un momento. Luego comienza a gimotear, se sienta y extiende la pata hacia su dueña, y solo deja de suplicar cuando ella se apiada y comienza a acariciarlo de nuevo.

Bueno, ya ves que sí es posible. El perro se calma, se acurruga de nuevo en la manta con satisfacción.

"Los pequeños arranques de ira del Golden Retriever son reales", bromeó la joven mujer bajo el clip que ya ha sido visto más de 2,9 millones de veces.

En la columna de comentarios, se encontró rápidamente la solución al problema de Zebby: "Bueno, simplemente no dejes de acariciarlo", sugirió un usuario y logró hacer sonreír a la dueña del hocico fruncido.

Afortunadamente, parece que Zebby le ha perdonado a su dueña. En otros videos de su cuenta, la estadounidense visita junto con el perro un supermercado, una playa y va de excursiones. No hay rastro de un perro enojado en estos videos.

Parece que el Golden Retriever recibe más que suficientes caricias de sus personas favoritas.