Hickory (EE. UU.) – ¿Quién no conoce esos cinco minutos en los que hasta el gato más tranquilo se vuelve loco? Una felina de North Carolina extendió ese lapso, buscó una víctima indefensa que tuviera que soportar al vándalo animal. Pero hubo una sorpresa.

Ansley Harwell, una maestra de primaria de Hickory, no pudo evitar apuntar su smartphone cuando su gato anaranjado, como mordido por un mono, se lanzó a través de la sala.

El felino utilizó el sofá como si fuera un elemento de parkour, catapultándose por la habitación con saltos temerarios.

En medio de todo: un pastor alemán que se había acomodado cómodamente sobre la alfombra. En lugar de una siesta, el perro tuvo que soportar al gato descontrolado, cuyas travesuras exageradas pronto se dirigieron contra él.

En un video de TikTok se ve cómo el felino acecha a su gran hermano con pupilas desorbitadas, salta peligrosamente cerca de su hocico y lo provoca descaradamente una y otra vez.

¿Y el pastor alemán? Sorprendentemente, se mantiene totalmente impávido.

Aunque el clip de Ansley dura solo 31 segundos, el gato parece haber estado fuera de sí durante dos horas. La estadounidense opina que la paciente reacción de su mascota merece un “premio”. “Al perro no le molestó en absoluto”, comenta la maestra de primaria.

Sin embargo, esa afirmación podría ponerse en duda si se observa la mirada desesperada del perro al final del video. Le lanza esa mirada a su dueña justo después de que, de fondo, se escuchara un fuerte estruendo, como si el perro quisiera decirle a Ansley: “¿Has oído lo que el gato ha vuelto a hacer?!”

Al público le encantan los diferentes temperamentos de los dos animales. El video de la maestra de primaria ha sido visto casi dos millones de veces.