«Un maullido lamentable»: el gatito quedó atrapado bajo el capó.
De Elke Richter
Augsburgo - Un gatito atrapado en el motor de un automóvil debe su vida a los bomberos de la Brigada de Bomberos de Augsburgo.
La dueña llevaba tiempo extrañando a su mascota cuando hizo un descubrimiento. De un coche sin matrícula se escuchó un “llanto de gato” que describió el cuerpo de bomberos tras la intervención del sábado. Los bomberos abrieron el capó y encontraron al indefenso animal.
«El gato estaba en una situación de verdadera urgencia, no podía avanzar ni retroceder. Maullaba de forma lamentable y miraba directamente a los rescatistas a los ojos», explicó un portavoz de los bomberos.
Afortunadamente para el animal y su dueña, en la intervención acudieron un mecánico y un cerrajero de máquinas, ambos profesionales capacitados.
Desmontaron hábilmente el filtro de aire y otras piezas del motor y, al fin, entregaron al gato ileso a su dueña.