¡Dustin, tan dulce, anhela con ansias un hogar: pero hay un problema!
Fulda - Pequeño, sin madre y sin hermanos: Dustin llegó solo como gatito al refugio de animales de Fulda. El vivaz felino está buscando un nuevo hogar. Pero hay un problema.

El destino no ha sido amable con el gato, que ya tiene poco más de dos años.
Se constató que estuvo en contacto con el coronavirus. El personal del refugio asume que su madre ya estaba infectada y que el virus se le habría transmitido a Dustin de esa forma.
Eso tuvo graves consecuencias para el pequeño, que seguramente le resultan difíciles de comprender. Debido al diagnóstico, no se le permite corretear, jugar ni acurrucarse con otros gatitos.
En su lugar, para proteger a los demás felinos del refugio, fue colocado en una habitación aislada para animales infectados con el coronavirus. No podrá salir al exterior ni tener contacto con gatos sanos durante el resto de su vida.
Al menos: no tiene que estar solo, sino que puede pasar el tiempo con otras gatas que también llevan el virus. Sin embargo, un hogar amoroso no puede sustituir eso para el normalmente sano Dustin.
Dustin, lamentablemente, tiene menos posibilidades de ser adoptado que otros gatos, sin que sea culpa suya.

Rara vez el coronavirus felino, que no debe confundirse con el virus humano Covid-19 , no aparece; de hecho, es bastante frecuente, sobre todo donde conviven varias gatos. En casos raros el virus puede mutar en el gato y provocar una enfermedad conocida como PIF (peritonitis infecciosa felina).
Durante mucho tiempo la mutación y sus consecuencias significaban prácticamente una sentencia de muerte en pocas semanas. Hoy en día existen enfoques terapéuticos prometedores.
Sin embargo, la situación de Dustin, que está castrado y tiene chip, sigue siendo incierta. La infección reduce considerablemente sus posibilidades de encontrar un nuevo hogar, tan deseado.
Uno de los problemas es que los posibles adoptantes humanos no pueden visitar al gato directamente, como ocurre con otros animales.
Además, el virus le causa diarrea, que según el refugio varía “de vez en cuando, más fuerte, a veces más leve”. Esto impide que pueda estar entrenado para usar la caja de arena en esos momentos. Un tratamiento ya en curso debería solucionar este inconveniente.
Se busca para él un hogar amoroso, preferiblemente con otro gato portador del virus y con un balcón seguro. Quien tenga un espacio libre en su casa y en su corazón y quiera conocer a Dustin, puede contactar al Refugio de Fulda llamando al 0661607413 o también vía correo electrónico.