Abandonado y medio hambriento: pero Tiger Tajmir recibió una segunda oportunidad
Nijeberkoop (Países Bajos) - Encerrado en una jaula sucia, sin protección contra el frío y la lluvia, totalmente demacrado, así encontró la policía en marzo de 2025 al tigre Tajmir en Chequia . Pero ahora hay una nueva esperanza para él.

Cuando las autoridades encontraron a Tajmir, su estado era catastrófico: desnutrido, infectado con salmonela, problemas articulares, el resultado de años de maltrato, según informa la organización de protección animal FOUR PAWS.
Ya antes había llamado la atención: fue condenado por la muerte de cinco leones bajo su custodia.
Cuando su casa fue subastada obligatoriamente, dejó al tigre atrás.
Pero entonces surgió finalmente una esperanza: tras años de sufrimiento, el tigre de doce años ha encontrado un nuevo hogar en el refugio FELIDA Big Cat Sanctuary en los Países Bajos .
Para Tajmir comenzó una nueva vida en el Santuario.

Con un vehículo especializado, equipado con sensores de temperatura, cámaras y una jaula de seguridad, la organización de protección animal llevó al tigre a su nuevo hogar.
«Tiene buen apetito y, tras su liberación, inspeccionó curiosamente su nuevo recinto interior», informó Juno van Zon, cuidador principal en la zona de protección FELIDA.
Según una actualización reciente en las redes sociales de la organización, Tajmir ha superado también todos los controles médicos y finalmente pudo explorar por primera vez el exterior de su nuevo territorio.
En lugar de suelo de hormigón y basura, lo esperan hierba, aire fresco, lugares de refugio e incluso una piscina.
El comercio ilegal de tigres sigue siendo un gran problema
El destino de Tajmir no es un caso aislado. Europa sigue siendo un eje del comercio ilegal de tigres. En el mercado negro, un tigre vivo llega a costar hasta 22.000 euros en Asia, según los defensores de los animales, mientras que en Europa su precio ronda los 5.000 euros. Muchos de los animales viven en patios traseros o son explotados en crías dudosas.
Los defensores de los animales exigen, por tanto, la prohibición mundial de la tenencia privada y del comercio comercial de los grandes felinos. «Esta crueldad debe acabar: los tigres no son mascotas», advirtió Patricia Tiplea de «FOUR PAWS».