Wolfgang Joop se lo cuenta todo: operaciones de belleza, caos de estilo y por qué los zapatos cómodos son su religión.
Potsdam - Wolfgang Joop ha alcanzado los 80 con estilo y una impresionante soberanía. En una entrevista, el nativo de Potsdam habla ahora sobre la obsesión por la belleza, las rupturas de estilo y cómo lo perciben sus hijos.

"Lo más importante que la moda hoy en día es el deseo de cambiar la morfología del propio cuerpo", lo cita BILD de la revista "Diva".
Según el diseñador, para algunas personas, nuevos senos o una corrección nasal son más urgentes que la nueva bolsa It. Muchas de ellas no hay nada que las haga más felices que una operación de belleza exitosa.
También él se ha sometido a alguna que otra operación, pero su estilo sigue siendo una estilística consciente.
"Busco joyas en mi fondo de ropa vintage y comienzo a experimentar con ellas. El resultado a veces parece completamente caótico, pero así es como me siento". La única cosa que valoro: calzado cómodo. Eso es "una referencia a la edad".
En su exitosa carrera como diseñador de moda, entendió en algún momento: "Lo cool no es lo que se lleva, sino cómo se para con ello. La pose equivocada arruina el conjunto de ropa más hermoso".
Wolfgang Joop: Trabajo en lugar de vacaciones

Aunque tiene 80 años, su carga de trabajo es alta. Trabaja desde el lunes hasta el sábado ocho horas al día. "Eso es naturalmente también una huida. No quiero pensar en mi vida. Por eso odio las vacaciones", dice Joop.
Además, el diseñador tiene varios años emocionantes detrás de él. Cuando comenzó a crear sus primeras prendas de vestir a principios de la década de 1970, no había modelos a seguir en la moda en Alemania. "El llamado Zeitgeist dirigió y hizo posible figuras como Karl Lagerfeld, Jil Sander y yo. Estábamos con los looks adecuados en el momento adecuado y en el lugar adecuado", reveló el nativo de Potsdam.
En 1970 se casó con Karin Joop-Metz. En 1985 se divorció, se declaró homosexual y se unió a Edwin Lemberg. En 2013 se dieron el sí.
Ahora los dos viven en su ciudad natal Potsdam desde hace unos 40 años.