Dieter Hallervorden insiste en su propia opinión: “Sin tener en cuenta los inconvenientes”.
De Sabrina Szameitat
Berlin - Dieter Hallervorden cumplirá 90 años este viernes (5 de septiembre). Como actor, cabarelista, propietario de un teatro y con su anterior personaje de slapstick “Didi”, se ha hecho un nombre muy conocido en Alemania.

En los años setenta escribió la serie televisiva «Nonstop Nonsens». «Palim, Palim» y «Kuh Elsa» se convirtieron en cultos para muchos. Hallervorden, nacido en 1935 en Dessau, es un artista polifacético y también polémico.
El actor subraya públicamente lo importante que es para él poder expresar su propia opinión. “Me formo sin tener en cuenta ventajas o desventajas de carácter político o privado”, explica Hallervorden en una entrevista con la dpa.
Al encontrarse con él, transmite energía y lleva zapatillas deportivas. En Hallervorden la nerviosidad va en aumento día a día, como cuenta en su teatro del parque del castillo. Allí, el viernes, interpretará el papel principal en el estreno de «El enfermo imaginario» de Molière, justo en su cumpleaños.
«El miedo escénico siempre está presente», dice Hallervorden en conversación con la Agencia Alemana de Prensa. «También tiene que ver con que, año tras año, uno sabe más qué cosas pueden salir mal. ¿De qué sirve el mejor monólogo, ensayado y representado maravillosamente, si el iluminador pulsa por accidente el interruptor equivocado y te quedas a oscuras?»
Antes de sus actuaciones, cuenta que se imagina una imagen de su esposa Christiane frente al espejo de maquillaje, a quien casó en 2022. Su tercer matrimonio. De sus dos primeros matrimonios tiene un total de cuatro hijos. La imagen de su esposa, sin duda, le recuerda que “hay cosas más importantes que un desliz verbal”.
Dieter Hallervorden y la lucha contra la imagen de “Witzel”.

Él también se imagina que sus padres y abuelos están en el público. “Aún recuerdo cómo ríen, cómo sonríen, y me imagino que están sentados allí abajo, y subo al escenario de buen humor y buena voluntad”.
Hallervorden fundó en Berlín el escenario de cabaret “Die Wühlmäuse”, y en Dessau abrió en 2022 su Teatro de la Alemania Central en la iglesia de Santa María.
El de 89 años luchó durante décadas contra su imagen de bromista. Que también se puede hacer de otra manera lo demostró hace doce años al público cinematográfico con la película “Su última carrera”.
Por ello recibió un Premio Alemán de Cine. También fue elogiado por su papel de abuelo con Alzheimer en la tragicomedia “Miel en la cabeza” (2014) junto a Til Schweiger.
Sin embargo, Hallervorden también ha recibido críticas por otras cosas. En el espectáculo conmemorativo de la ARD utilizó, en una versión ligeramente modificada del sketch “Palim, Palim”, la “n‑palabra” y la “z‑palabra”, consideradas discriminatorias. Algunos usuarios en redes sociales le acusaron de racismo. Hallervorden defendió su actuación como sátira .
Ahora lo que se celebra es su 90.º cumpleaños. El sábado (6 de septiembre) está prevista una gala sorpresa para él en el Schlosspark Theater.