Escándalo en Viena: un jugador golpeado en la cabeza por vasos de cerveza
Viena (Austria) - Se suponía que iba a ser una noche memorable en el Viena-Hütteldorf, pero al final los seguidores del Rapid de Viena protagonizaron un auténtico escándalo. En el partido de vuelta de los cuartos de final de la Conference League , los seguidores demostraron ser malos perdedores.

Era la prórroga cuando Tobias Gulliksen (21) marcó el 4:1 para el Djurgardens IF sueco. Poco después de su gol, unos vasos de cerveza volaron repentinamente desde las gradas hacia el campo mientras él y sus compañeros lo celebraban.
Los proyectiles golpearon al noruego en la nuca. El contenido ya se había derramado sobre sus compañeros y había golpeado a otro jugador.
Tras su segundo gol del partido, se acabó la historia deportiva. El Rapid había ganado el partido de ida por 1-0 en Suecia. Pero muy pronto, Mamadou Sangaré (22) frustró sus sueños de progresar al ver la tarjeta roja en el minuto 7 por una dura falta.
A partir de ese momento, los anfitriones se vieron en inferioridad numérica y concedieron un penal por mano poco antes del descanso. La pena máxima fue señalada por el árbitro inglés Anthony Taylor (46), que no pitó el penal por mano de Marc Cucurella (26) en el partido de cuartos de final de la Eurocopa entre Alemania y España ( ).
Cuando Tobias Gulliksen marca el 4:1, la frustración de los aficionados del Rapid no tiene límites.

Marcus Danielson (36) transformó el penalti para poner el 1:0 a favor de los visitantes. Sin embargo, un gol en propia meta de Jacob Une Larsson (31) reavivó las esperanzas del Rapid. Los equipos se fueron al descanso empatados.
Los austriacos lucharon valientemente en la segunda parte con sólo diez hombres, pero fue Keita Kosugi (19) quien envió al Djurgardens a la prórroga con un gol de ensueño en el minuto 77, que supuso el 2-1 definitivo.
Gulliksen marcó a continuación por partida doble, y la frustración entre el Rapid y sus seguidores fue mayúscula. Sin embargo, no había motivo para lanzar vasos de cerveza a los jugadores rivales.
El doble goleador, pero también Viktor Bergh (25), que cayó brevemente, fueron alcanzados por los vasos.
Además de la eliminación, esto también tendrá repercusiones desagradables para el Rapid.