Descubierta una casa del terror en Brasil: un hombre mantuvo cautiva a su familia durante 23 años
Novo Oriente de Minas (Brasil) - ¡La más pura pesadilla! Un brasileño habría mantenido cautiva a su pareja durante 23 años en una cárcel privada, donde ella tenía que estar a su disposición como esclava sexual. El hombre, de 52 años, también habría abusado regularmente de sus hijos y de su suegra.

Durante más de dos décadas, la mantuvo prisionera en su choza, abusó de ella repetidamente y la obligó a abortar tres veces.
Se trata de un crimen que está sacudiendo el estado brasileño de Minas Gerais. Según informa el portal"G1" , un hombre de 52 años ha sido detenido por toda una serie de crímenes atroces contra su propia familia.
Según la policía, el hombre mantuvo a su pareja, de 40 años, en una "prisión privada" en su casa del norte rural del estado durante más de dos décadas, forzándola repetidamente a mantener relaciones sexuales y engendrando con ella siete hijos, que ahora tienen entre 3 y 22 años.
La investigación sobre el "Monstruo de Novo Oriente" comenzó después de que la hija mayor (22) le diera somníferos y pudiera entonces revelarse a la policía. El hombre fue detenido. Los supervivientes están a salvo.
Los hechos del "Monstruo de Novo Oriente" causan horror

Cuando su pareja, víctima de malos tratos, se quedó embarazada, le administró medicamentos para provocarle el aborto. El hombre enterró tres fetos muertos en el jardín, detrás de la cabaña del horror , donde la policía encontró huesos humanos y ropa de bebé.
"La víctima sólo salía de casa para recibir prestaciones sociales y a menudo iba acompañada por él. Ninguno de los vecinos la conocía, ni siquiera sus familiares tenían acceso a ella", declaró la portavoz policial Hérika Sena.
Sin embargo, el agresor sexual también cometía regularmente delitos contra sus propias hijas. Según la portavoz policial, el hombre hacía agujeros en las paredes de la casa para poder ver a las niñas bañarse y vestirse.
Ni siquiera la suegra estaba a salvo de las agresiones; también sufrió abusos sexuales y ya ha fallecido. "Estaba enferma, él no le prestó asistencia médica y la señora murió", declaró la portavoz.
Tras su detención, el agresor de 52 años no se disculpó en absoluto, según informa la CNN. No mostró ningún remordimiento y, de hecho, afirmó que había tratado a su familia "con mucho cariño" y que era un padre "cariñoso" en general.
El hombre probablemente tendrá que responder pronto ante un tribunal por privación de libertad, violación, violación de persona vulnerable, violencia psicológica, aborto y ocultación de cadáver.