¡Zona de seguridad enorme! Los visitantes del parque están enfadados con Kate y William.
Windsor - La mudanza de el príncipe William y su esposa Kate (ambos de 43 años) a una residencia más grande en el Windsor Great Park ha generado inquietud desde el verano.
Primero, dos familias que vivían justo al lado de la nueva residencia real tuvieron que desalojar sus casas. Ahora, los residentes del extenso parque también se quejan de las restricciones.
Se ha establecido una zona de exclusión de diez kilómetros alrededor de Forest Lodge, con vallas, cámaras de vigilancia y carteles de “Acceso prohibido”, como informó el Daily Mail.
Los vecinos se sienten sorprendidos por las medidas. “Estamos decepcionados”, dijo a la prensa un propietario de un perro que suele pasear con su mascota por el Windsor Great Park. “Dicen que se pueden usar otras entradas, pero no sirve porque no hay aparcamiento en ningún lado”.
Hace pocos meses, los residentes que vivían a un radio de un kilómetro y medio del parque podían acceder a la zona exclusiva pagando una tarifa de 60 libras (casi 70 euros).
Esa normativa ha quedado anulada. “Hubiera sido correcto que enviaran una botella de vino o algo similar como disculpa”, comentó un vecino.
"Entendemos que necesiten su privacidad, pero es realmente una lástima. Estamos absolutamente devastados", dijo un residente que lleva 20 años viviendo en la zona.