Su casa se hizo famosa por una gran serie de televisión: ¡la familia ya está harta de fans molestos!

Albuquerque - Donde vivían Walter White, su mujer Skylar y su hijo Flynn en el mundo ficticio de Breaking Bad, ahora vive una familia normal en la realidad. Ya no soportan vivir allí y quieren vender la casa.

Esta casa se convirtió en un auténtico imán para los fans gracias a la serie de televisión "Breaking Bad".
Esta casa se convirtió en un auténtico imán para los fans gracias a la serie de televisión "Breaking Bad".  © Screenshot/Breaking Bad Wiki

Cuando sonó el timbre de la puerta de Fran y Louis Padilla en 2006, la familia no tenía ni idea de que medio mundo pronto se asomaría a su salón.

Por aquel entonces, los productores de la conocida serie de televisión , en la que un aburrido profesor de química se convierte en un temido cocinero de metanfetamina, se presentaron en su puerta y les explicaron que les gustaría utilizar la propiedad de la ciudad estadounidense de Albuquerque para rodar, según recuerda su hija Joanne Quintana a la cadena estadounidense"KOB-TV".

Lo malo: con la fama de la serie, cada vez más fans peregrinaban hasta su casa, haciendo imposible una vida normal. Ni siquiera una valla alrededor de la casa y la instalación de sistemas de alarma sirvieron para cambiar la situación. "Tenemos una media de 300 coches al día", dice Quintana.

Los dos actores principales de Breaking Bad: el actor Aaron Paul (45, izq.) se metió en el papel de "Jesse Pinkman". Bryan Cranston (68, d.) en el papel de "Walter White". (imagen de archivo)
Los dos actores principales de Breaking Bad: el actor Aaron Paul (45, izq.) se metió en el papel de "Jesse Pinkman". Bryan Cranston (68, d.) en el papel de "Walter White". (imagen de archivo)  © EPA/PAUL BUCK

La familia quiere vender la propiedad

Tras la muerte de sus padres, ha llegado el momento de vender la propiedad: "Ésta ha sido nuestra casa familiar desde 1973, casi 52 años. Sólo nos iremos con nuestros recuerdos. Es hora de seguir adelante. Hemos terminado. No hay necesidad de seguir luchando".

Ahora la casa está a la venta por un precio de cuatro millones de dólares (unos 3,9 millones de euros).

Aunque los fans intrusivos no siempre eran soportables, la propietaria espera que su casa siga asociada al programa de televisión en el futuro: "Espero que la conviertan en lo que los fans quieren. Quieren un BnB, quieren un museo, quieren tener acceso a ella".