Roma (Italia) - La Iglesia católica tiene un nuevo Papa : ¡un estadounidense! Después de sólo 24 horas, los 133 cardenales del cónclave eligieron inesperadamente a Robert F. Prevost (69) como sucesor del difunto Papa Francisco (†88). Poco después de las 18:00 horas, estallaron vítores en Roma mientras un humo blanco se elevaba sobre la Capilla Sixtina. El 267º Papa de la Iglesia católica elige el nombre de León XIV.

"¡La paz sea con todos vosotros!" Con estas palabras, el recién elegido Papa León XIV saludó a decenas de miles de creyentes en la Plaza de San Pedro y las calles adyacentes, así como a 1.400 millones de católicos de todo el mundo, en medio de un atronador aplauso poco antes de las 19.30 horas.

La elección de Robert F. Prevost puede considerarse un compromiso y, al mismo tiempo, una señal de unidad. Prevost combina formación estadounidense, sabor latinoamericano (habla español con fluidez) y experiencia de liderazgo romano.

Esto le convirtió en el candidato de consenso de un Colegio Cardenalicio que tuvo que superar diferencias culturales y político-eclesiásticas.

Nacido en Chicago en 1955 de padres con raíces franco-españolas-italianas, Prevost estudió inicialmente matemáticas antes de ingresar en la orden agustiniana en 1977. Fue ordenado sacerdote en Roma en 1982. Posteriormente se doctoró en Derecho Canónico.

Desde mediados de los 80, Prevost trabajó como misionero en Perú. Allí fundó parroquias, dirigió un seminario y participó activamente en la formación de obispos.

En 2015, el papa Francisco lo nombró obispo de Chiclayo, una diócesis del norte del país. Durante las crisis políticas, hizo campaña por la estabilidad.

En 2023, fue ascendido a dirigir el poderoso Dicasterio para los Obispos, la autoridad vaticana que selecciona a los obispos de todo el mundo. Ese mismo año recibió el birrete cardenalicio y hoy, jueves, el báculo papal.

Prevost representa la continuidad en el espíritu de Francisco. Se le ve como alguien que escucha, media y quiere el cambio sin polarizar. En sus primeras palabras en italiano, español y latín, trató de transmitir confianza: "El mal no prevalecerá."

En una primera reacción, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump (78), habló de "gran honor" y felicitó a su compatriota: "Es un gran honor darse cuenta de que es el primer Papa estadounidense."