New York City (EE. UU.) – Hace exactamente 12 años, Jason Collins (46) se convirtió en el primer deportista de las cuatro grandes ligas profesionales estadounidenses en declarar públicamente su homosexualidad. US‑americano , pero ahora hay una gran preocupación por el exestrella del baloncesto .

Collins debe afrontar una dura prueba de la vida. Según anunció la National Basketball Association (NBA) el jueves (hora local), el jugador de 46 años ha sido diagnosticado con cáncer.

Collins, que pasó ocho de sus 13 temporadas como profesional activo en la metrópolis estadounidense de Nueva York, padece un tumor cerebral y, a raíz de este terrible diagnóstico, necesita recibir tratamiento.

«Jason y su familia agradecen su apoyo y sus oraciones, y solicitan amablemente privacidad mientras se centran en la salud y el bienestar de Jason», se lee en el comunicado oficial de la liga de baloncesto más fuerte y popular del mundo.

No se han revelado detalles sobre el estado actual de salud del deportista nacido en Los Ángeles, ni la gravedad de la enfermedad.

En 2001, el ex-centro de 2,13 metros de los Houston Rockets fue seleccionado con la posición 18.

Hasta su retiro en 2014, disputó un total de 735 partidos, también jugando para los Memphis Grizzlies, Atlanta Hawks, Boston Celtics, Washington Wizards y Minnesota Timberwolves.

En 2013 se declaró públicamente homosexual, marcando un hito en el deporte estadounidense: Collins fue el primer profesional de las cuatro grandes ligas en hacer pública su identidad sexual mientras aún estaba activo.

«No tenía la intención de ser el primer deportista abiertamente gay en un deporte de equipo importante en Estados Unidos», explicó Collins en aquel entonces en su artículo para Sports Illustrated.

«Pero como lo soy, me alegra iniciar la discusión. Desearía no ser el chico en el aula que levanta la mano y dice: ‘Soy diferente’. Si fuera por mí, ya lo habría hecho alguien más. Nadie lo hizo, así que yo lo hago.»