Por Barbara Munker, Laura Almanza

Los Ángeles - Los incendios forestales en torno a la metrópolis estadounidense de Los Ángeles están llegando a su fin.

Un tercer incendio cerca de la localidad de San Fernando, al norte de Los Ángeles, se ha extendido por una zona de más de dos kilómetros cuadrados, según las autoridades.

Los residentes de las comunidades vecinas se han visto obligados a evacuar sus hogares.

Al menos otros dos incendios están causando estragos cerca de la metrópolis de la costa oeste. Según las autoridades, el mayor de ellos, cerca del distrito de Pacific Palisades, abarca ya una superficie de casi doce kilómetros cuadrados.

Otro incendio está ardiendo cerca de la ciudad de Pasadena, al noreste de Los Ángeles, con una superficie de más de cuatro kilómetros cuadrados.

Los tres incendios aún no han sido controlados. Hay órdenes de evacuación para decenas de miles de personas. Varias personas han sufrido quemaduras, informó Los Angeles Times.

Los fuertes vientos con velocidades de hasta 160 kilómetros por hora podrían agravar aún más la situación en las próximas horas, dijo a la CNN un portavoz de la autoridad de protección contra incendios Cal Fire.

"Nuevos incendios están brotando del suelo mientras hablamos".

Todavía se desconoce la causa de los incendios y el alcance de los daños. Los medios de comunicación informan de que varios edificios han quedado destruidos, entre ellos una sinagoga en Pasadena.

También habrían ardido numerosas casas en el acomodado barrio de Pacific Palisades, donde tienen viviendas estrellas como Jennifer Aniston, Bradley Cooper, Tom Hanks y Reese Witherspoon.

Más de 52.000 personas han tenido que abandonar sus hogares debido a los feroces incendios cerca de Los Ángeles. Casi 21.000 edificios están actualmente amenazados por las llamas.