Boca Raton (Florida) - ¿Fue una llamada de auxilio intencional? Los propietarios de casas en Boca Raton, Florida, no dejaron de sorprenderse cuando, en noviembre, vieron a una nutria nadando en su piscina. Sin embargo, el animal tenía un problema serio.

Afortunadamente, los propietarios de la casa solicitaron ayuda directamente al South Florida Wildlife Center (SFWC). Pronto se descubrió que la nutria sufría debilidad muscular.

«Afortunadamente mostraba un comportamiento normal y estaba en buen estado físico. Pero estaba notablemente más tranquila de lo que es típico para su especie y edad», dijo la empleada del SFWC, Haillie Mesics, en una entrevista con The Dodo.

Por eso los veterinarios revisaron a fondo a la nutria. Resultó que padecía ataxia, es decir, una falta de coordinación muscular. Esta condición podía haber sido provocada por un traumatismo craneal, una intoxicación o una enfermedad infecciosa.

Los empleados ahora tenían aún un tramo por recorrer con su paciente animal.

Después de la primera semana de tratamiento, el animal salvaje parecía estar solo un poco mejor. “Con el paso de los días, su apetito y su estado mejoraron. Se mostraba más despierto y atento”, explicó Mesics a la revista de fauna.

Aun así, el nutria necesitó varias semanas más para recuperar realmente sus fuerzas. Finalmente, sus rescatistas se atrevieron a dar el siguiente paso y colocaron al animal acuático en aguas más profundas.

Mientras tanto, los dueños de la piscina notaron que, cerca de su casa, una familia de nutrias vivía en un estanque. En el SFWC, entonces, se sumó todo.

“Siempre hacemos lo posible por devolver a los animales salvajes al área donde fueron encontrados, sobre todo cuando allí hay congéneres”, declaró Mesics.

Exactamente eso fue lo que hicieron con su protegido. La nutria pronto volvió a ponerse en pie, nadó junto a sus congéneres y se alejó.