EE.UU./Minnesota - Es una ceremonia agridulce: una pareja se da el "sí, quiero" en cuidados intensivos después de que la novia, muy embarazada, fuera ingresada en el hospital apenas dos semanas antes de la fecha prevista para la boda.

Según informa Northern News New, Arianna Sleen, de 23 años y natural del estado norteamericano de Minnesota, fue hospitalizada por un fuerte dolor de espalda, pero su estado empeoró drásticamente.

Los médicos le diagnosticaron neumonía grave y shock séptico. Como consecuencia, tuvo que recibir respiración artificial, todo ello mientras estaba embarazada de su primer hijo.

Su estado siguió siendo crítico durante varios días, según una página de GoFundMe. También luchaba contra una grave infección urinaria y una inflamación renal con abscesos.

"Estaba muy asustada. Son las dos personas más importantes de mi vida, y las dos estaban luchando por sobrevivir", dijo el novio, Chandler Sleen.

Pero a pesar de todas las complicaciones, se produjo el milagro: el estado de Arianna mejoró de repente y le desconectaron el respirador exactamente un día antes de la boda prevista.

A la mañana siguiente se levantó por primera vez y decidió sin más dilación seguir adelante con la boda.

El hospital también apoyó la conmovedora idea y las enfermeras se convirtieron rápidamente en organizadoras de la boda.

Prepararon la habitación de la pareja, hicieron sitio para la comida e incluso organizaron una tarta nupcial.

Después de que las enfermeras decoraran la habitación y ayudaran a Arianna a ponerse el vestido de novia, ella y su prometido se dieron el "sí, quiero" junto a la cama del hospital.