Un golden retriever pierde de vista a su dueña: su reacción encandila a tantos

Nueva York (EE.UU.) - Una vez más, Instagram ha demostrado que unos segundos de vídeo bastan para encandilar a una audiencia de millones de personas. Esta vez se trata del golden retriever Millie, que perdió de vista a su dueña en el Central Park de Nueva York.

La golden retriever Millie y su dueña Hayley Zukerberg son un solo corazón y una sola alma. Incluso una separación de solo unos segundos puede causar pánico en el perro.
La golden retriever Millie y su dueña Hayley Zukerberg son un solo corazón y una sola alma. Incluso una separación de solo unos segundos puede causar pánico en el perro.  © Bildmontage: Instagram/Screenshots/millieinthecity_

El curioso vídeo ya ha superado la barrera de los diez millones en menos de una semana. En él, la perra corretea por una acera de Central Park con la correa en la boca.

Parece cada vez más desesperada y no ve a su dueño, que la está grabando, por ninguna parte. A pesar de que la neoyorquina se encuentra a pocos metros de la perra, ésta corre en su busca.

Eso es suficiente para derretir los corazones de los usuarios de Insta por docenas. Más de 600.000 likes ha conseguido hasta el momento... y subiendo.

"Millie acaba de cumplir un año y ya está convencida de que es una mujer adulta e independiente", dijo Hayley Zukerberg en una entrevista reciente con Newsweek.

Pero, ¿por qué pasea esta golden retriever por Central Park con su propia correa en la boca?

El curioso vídeo de un golden retriever ya tiene diez millones de clics en Instagram

Irritada, Millie busca a su amante.
Irritada, Millie busca a su amante.  © Instagram/Screenshot/millieinthecity_

Según su dueña, Millie tiene una personalidad "Larger than Life", por lo que se comporta a lo grande, como si fuera un héroe de cómic.

"Le encanta llevar su propia correa y pasear con confianza por el parque como si estuviera al mando", explica Zukerberg a la revista estadounidense.

"Estaba grabando uno de estos momentos cuando de repente se paró a mitad de camino y se dio la vuelta como diciendo: 'Un momento, ¿no estaba yo con alguien?", añadió el amante de los perros.

Estaba a sólo unos seis metros detrás de ella. Pero Millie estaba atrapada en su propio mundo, dijo la estadounidense .

"Tiene una personalidad muy divertida y me hace muy feliz que la gente se enamore de ella como yo", concluye la joven.